salud

jueves, 1 de diciembre de 2011

Deporte, estres y ansiedad




1. Introducción

    El estudio de la ansiedad en los deportistas de alto rendimiento abarca un gran espacio en la literatura en Psicología del Deporte, (R. Martens, 1977, 1983, Y. Hanin, 1989, C. D. Spielberger, 1989).
    La importancia radica en el impacto que tienen los estados emocionales negativos sobre los rendimientos en competencia y entrenamientos. Gran parte de los fracasos en competencias se explican por problemas debidos al manejo de la ansiedad. (Márquez, 1992, R. S. Lazarus, (2000) J. Hammermeister, y D. Burton (2001).
    Cualquier circunstancia humana puede verse impregnada de un determinado nivel de ansiedad. Las situaciones de competición deportiva, donde el resultado obtenido y las consecuencias que se derivan del mismo, pueden determinar el presente y el futuro como profesional del deporte (contratos, valoración social, continuidad, autoestima etc.), generan en el organismo estados de ansiedad que es preciso controlar. La mayoría de deportistas y técnicos, cuando se tienen que enfrentar a una competición, sienten en mayor o menor grado un estado de nerviosismo, que puede aparecer incluso días antes de la propia competición, y que, influye en el rendimiento deportivo.
    La ansiedad en la actividad deportiva es particularmente amplia por el hecho de que aquí, la persona posee un antecedente considerable de carga física y neuropsíquica en las sesiones de entrenamiento y competición, estando constantemente sometido a la actuación de las más variadas influencias interpersonales y ambientales (Straub,1978). Pero con independencia del sentido positivo o negativo que pueda tener un determinado estímulo, existen algunas situaciones características que contribuyen a convertir un estímulo en una situación de ansiedad.




2. Concepto de ansiedad

    La ansiedad es un estado emocional negativo que incluye sensaciones de nerviosismo, preocupación y aprensión, relacionadas con la activación del organismo. Así pues, la ansiedad tiene un componente de pensamiento (por ejemplo, la preocupación y la aprensión) llamado ansiedad cognitiva, y un componente de ansiedad somática, que constituye el grado de activación física percibida.
    La ansiedad es considerada como un factor o rasgo permanente de la personalidad. Este es el grado de ansiedad que presenta generalmente un individuo en la mayoría de las situaciones. Es la disposición latente a comportarse de manera más o menos ansiosa bajo situaciones de stress.
    La ansiedad también es considerada como un estado temporal, aquélla evocada por circunstancias especiales, y se refiere a los sentimientos subjetivos de tensión que un individuo experimenta en determinadas circunstancias percibidas como amenazadoras, sin relación con el verdadero peligro presente.
     Por tanto, en el deporte de competición, la persona con una ansiedad-rasgo elevada es generalmente más propensa a experimentar sentimientos de ansiedad-estado más elevada que la persona con nivel bajo de ansiedad-rasgo. Esta situación depende de cómo un individuo interpreta las circunstancias competitivas particulares. Su interpretación se verá influida por diversos factores tales como las experiencias anteriores, la capacidad y el entrenamiento en el manejo del stress.

3. Una afección aprendida

     La ansiedad es un fenómeno natural. La ansiedad es común a todos los animales. Es esencial para su supervivencia y no hay nada de extraño en ella. ¿Por qué, pues, resulta tan desconcertante cuando se experimenta en exceso? Es, después de todo, un fenómeno puramente natural.
    Es una respuesta puramente automática y condicionada, vitalmente importante para la supervivencia. Una poderosa sustancia llamada adrenalina es liberada al torrente sanguíneo.
    La liberación de esta sustancia permite una respuesta inmediata en múltiples órganos. Los músculos se tensan, la sangre se traslada hacia ellos y el hígado rellena dicha sangre con azúcar para que puedan operar con más fuerza. La respiración es más profunda y hay más oxígeno en la sangre.
    A esta asombrosa reacción se la ha denominado desde siempre como la reacción "vuela o lucha". Tonifica nuestros cuerpos de modo que se pueda correr más rápidamente de lo que se podría hacer normalmente, o que se pueda permanecer y luchar con más fuerza de la que se tendría normalmente. Todos los mamíferos la tienen, y por tanto también los seres humanos.
    En la fracción de segundo en que se ve el peligro, se oye el peligro o se siente el peligro, la reacción se pone en marcha. No se tiene que hacer nada conscientemente. Es una reacción instantánea de puesta en movimiento de todos los sistemas que nos permite responder a los peligros de nuestro entorno. Todo eso está muy bien si nuestros cuerpos han aprendido las lecciones correctas. ¿Qué sucede si se ha aprendido lecciones erróneas? ¿Qué ocurre si a lo largo de los años nuestros cuerpos han aprendido que podrían ser peligrosas algunas cosas que otra gente no consideraría peligrosas en absoluto? Obviamente, la reacción se disparará en momentos inadecuados y en situaciones inconvenientes.
    Los humanos tienen una dificultad suplementaria. Se puede pensar de modos más complejos. Se tiene también un concepto distinto del peligro que los animales. Para ti y para mí, tirar un penalti en una final de fútbol podría ser una situación peligrosa, y, como podemos pensar de antemano, el pensamiento mismo de tener que tirar ese penalti en otro momento puede inducir la reacción de la adrenalina.
    Algunas personas, y algunos animales, son más nerviosas que otras. La reacción de "volar o luchar" se activa más fácilmente y más a menudo. Experimentos con animales han demostrado que si un animal se encuentra estresado producirá más adrenalina, hallándose así más expuesto a la ansiedad, de modo que si tú o yo somos de disposición nerviosa por naturaleza, o si nos encontramos estresados, estas reacciones aprendidas ocurrirán más a menudo y pueden entrometerse, de manera que desarrollaremos los síntomas de la ansiedad.
    Esto nos devuelve a nuestro punto de partida. Las poderosas, y aparentemente inexplicables sensaciones que una persona impaciente experimenta en ciertas situaciones, son de hecho fácilmente explicables. Son un fenómeno natural del mundo natural, no tiene nada que ver con ser incapaces de manejar la situación, y sólo en parte tiene que ver con el estrés de la vida moderna. Lo que esa persona experimenta es simplemente una exageración de una reacción que todos experimentamos, una reacción que todos los animales experimentan también. No es nada de lo que haya que asustarse, y puesto que es una reacción "aprendida", puede ser también "desaprendida" si la abordas del modo adecuado.

4. Desarrollo del estado de ansiedad

    Simplemente porque el cuerpo de un deportista ha ido aprendiendo a estar ansioso, quizás durante años. Es un acto inconciente y no te das cuenta de ello. El cuerpo realiza muchas acciones inconciente y la liberación de adrenalina es una de ella. No hay modo alguno de que cuando se acerca el partido de tenis puedas controlar la sudoración, o detener las molestias en el estómago. Y sólo hay una razón: la liberación de adrenalina es natural. Necesitamos adrenalina. Cuando la necesitamos, la necesitamos rápido. Su producción es fisiológica, normal, una respuesta natural e inmediata ante una situación de estrés. En las cantidades correctas es vital, pero en exceso es destructiva.

5. Una afección mental y física

     Es la percepción mental de la ansiedad lo que te conturba, pero un estado de ansiedad es más que eso, es también un estado grave de incomodidad física, de palmas sudorosas, manos temblorosas, y otros muchos síntomas puramente físicos. Para entender realmente la ansiedad, has de entender la estrecha relación existente entre mente y cuerpo, pues un estado de ansiedad es una afección psicológica y física.
     La ansiedad provocada por una situación de estrés es, pues, una mezcla de lo físico y de lo psicológico, ésta es la clave, no sólo para comprenderla sino para derrotarla o controlarla. Por ejemplo, cuando estamos ante una situación de estrés competitivo como puede ser el último punto del último set de un partido de tenis; en esta situación se alcanza un nivel de ansiedad bastante elevado, se empieza a sentir síntomas físicos como sudoraciones y sólo porque el cuerpo lo ha producido automáticamente.
    Las personas carecemos de control voluntario sobre nuestro sistema nervioso autónomo, el cual, a su vez, controla todas estas funciones corporales que están en marcha en todo momento sin que nos percatemos de su acción. El problema para un deportista en una situación de estrés es que las cosas se salen un poco de control, se desbocan, y en vez de ser automáticas y silenciosas, esta parte de nuestro sistema nervioso comienza a producir sensaciones que no nos agradan, sensaciones que hemos aprendido como estresantes.
     La glándula adrenal es la parte del sistema nervioso automático. Tal vez te extrañe un poco, pero las glándulas reaccionan al estímulo nervioso y no hay nada de extraño en el modo en que reacciona nuestra glándula adrenal. La adrenalina es uno de los transmisores químicos del sistema nervioso autónomo, y la glándula adrenal, localizada justo por encima del riñón, produce la sustancia denominada adrenalina y la libera al torrente sanguíneo en respuesta a la estimulación por un nervio procedente del cerebro.
     Entonces cuando el deportista analice una situación de peligro, la glándula liberará adrenalina. Utilizando el torrente sanguíneo para distribuir la adrenalina, el cuerpo es capaz de estimular todo nuestros órganos diferentes al mismo tiempo, produciendo una reacción en masa.



6. Proceso por el que se producen los síntomas

    Ante una situación estresante, se produce la reacción explicada anteriormente, que liberaba adrenalina al torrente sanguíneo que nos hace sentirnos muy mal. Aprendemos a temer estos síntomas que asociamos con una situación particular (lanzamiento de tiro libre de baloncesto en situación de empate en el último minuto) y entramos en un círculo vicioso si no somos capaces de controlar estas situaciones.
    Vamos a ver este círculo vicioso en el que podemos entrar: 

Se va a poner un ejemplo para entender el siguiente gráfico:

    Ese deportista que estaba a punto de lanzar el tiro libre en una situación estresante como es con el resultado igualado dentro del último minuto. Este lanzador sabe que no puede fallar que se juega el partido. Esa presión, el jugador la entiende como una situación estresante, que ha sido aprendida. Entonces el cuerpo automáticamente libera adrenalina al torrente sanguíneo lo que provocarán síntomas de la ansiedad como son las sudoraciones, temblores de las manos y piernas, etc. Este jugador teme la aparición de estos síntomas, entonces al aparecer, lo que hacen es empeorar lo que provocará una disminución del rendimiento o provocará que ese jugador no tenga la concentración adecuada para la realización de ese lanzamiento, lo que hará que falle el tiro libre.

7. Síntomas generales de la ansiedad
    
    A continuación se va a ver una serie de ejemplos de los principales síntomas que se pueden desencadenar provocados por una situación de estrés competitivo: (sólo se citará ejemplos de síntomas que han podido sentir los deportistas en situaciones estresantes, y no personas con ansiedad excesiva)
  • Tensión muscular, dolores y molestias estomacales, dificultades respiratorias, diarrea y ganas de orinar, fatiga excesiva, trepidación, leve mareo, palpitaciones y molestias estomacales.

    
Ningún deportista siente todos estos síntomas a la vez, pero en ocasiones un síntoma puede desencadenar otro. Así el hecho de que, cuando supera un síntoma, puede superar más, pues muchos síntomas son provocados por los mismos factores físicos.

8. Manifestaciones de la ansiedad en la competición

    La ansiedad precompetitiva es un estado negativo, que ocurre durante las 24 horas anteriores a una competición. La ansiedad precompetitiva resulta de un desequilibrio entre las capacidades percibidas y las demandas del ambiente deportivo. Cuando las demandas percibidas están equilibradas con las capacidades percibidas, se experimenta un estado óptimo de (alerta/vigilancia). La ansiedad precompetitiva resulta cuando la destreza y la habilidad del deportista no son percibidas como equivalentes a las del contrincante.
    Hay cinco factores que intervienen en la ansiedad precompetitiva:
  • SINTOMAS FISICOS: molestias digestivas temblores, etc.
  • SENTIMIENTOS DE INCAPACIDAD: sensación de no estar preparado, de que algo está mal.
  • MIEDO AL FRACASO: a ser vencido, a retrasarse, a no cumplir con las expectativas.
  • AUSENCIA DE CONTROL: sentirse gafe, mala suerte.
  • CULPABILIDAD: dañar al oponente, jugar sucio, hacer trampas, etc.
    Con respecto a los factores personales-situacionales, existen algunas situaciones características que contribuyen a convertir un estímulo en una situación de ansiedad; entre ellas se citan: los cambios en la situación habitual, información insuficiente o errónea, sobrecarga en los canales de procesamiento, importancia del evento, inminencia del estímulo, falta de habilidad para controlar la situación, autoestima, etc.
    Con respecto a la percepción del rival, este apartado se podría relacionar con la ansiedad precompetitiva. Cuando un deportista sabe con el rival que va a competir, desde ese momento empieza su preocupación si sabe que es superior a él. No está relajado con lo que tendrá muchas preocupaciones que harán disminuir su rendimiento notablemente.
    Con respecto al público, la influencia de la presencia de otras personas puede influir sobre el rendimiento del sujeto. Los primeros trabajos datan de 1898 y fueron realizados por un psicólogo norteamericano llamado Triplett. Constituyen además la primera investigación de psicología social experimental. Este sector de estudio en primer lugar se llamó de la "facilitación social" porque los investigadores pensaban que la copresencia favorecía el rendimiento. Tripplet había demostrado efectivamente que un niño realizaba mejores rendimientos en presencia de espectadores pasivos que solo. La investigación ha seguido hasta nuestros días y, actualmente, la teoría desea que la presencia de otras personas eleve el número de respuestas dominantes. Esto tiene como consecuencia el hecho de que un sujeto obtiene mejores resultados si la tarea está bien dominada, o sea las respuestas dominantes son buenas respuestas, y menos buenos resultados si la tarea está mal controlada, o sea las respuestas dominantes son malas respuestas.
    En el ámbito deportivo los espectadores no son pasivos. El equipo que juega en el exterior experimenta una fuerte presión por parte del público. El estrés experimentado por los jugadores será así elevado. Para paliar esta presión, se puso a punto una técnica hace ya más de veinte años: se trata de un entrenamiento modelado que consiste en reproducir durante el entrenamiento las condiciones del futuro partido, en realizar un modelo. Así para los jugadores esa situación de estrés que producía un estado de ansiedad poco a poco se podría ir venciendo hasta acostumbrarse hasta el punto de no percibir la situación como estresante.

9. Conclusiones

    El estado de ansiedad puede ser desencadenado por algún suceso que origine estrés en el competidor. A menudo se siente ansiedad ante situaciones de estrés.
    Las sensaciones de ansiedad son producidas por la adrenalina. La adrenalina es una sustancia natural. La reacción de la adrenalina es aprendida; por consiguiente, se puede enseñar a nuestros cuerpos a producir menos adrenalina
    La ansiedad tiene un lado mental y otro lado físico; y ésta, establece un círculo vicioso.
    El estado de ansiedad produce síntomas físicos y entender como se producen esos síntomas te hacen superarlo con más facilidad. Casi todos los síntomas son producidos por tener demasiada adrenalina en el torrente sanguíneo.
    La tensión muscular es a menudo la razón física por la que te sientes mal.

mirad este video porque es espectacular:


Referencias bibliográficas
  • CHEVALLON, S. (2000). El entrenamiento psicológico del deportista. Barcelona: editorial De Vecchi.
  • CRUZ, J. (1997). Psicología del deporte. Madrid: Síntesis.
  • DEMOJA, C. A. & J. DEMOJA (1986) Analysis of anxiety trend before a sport competition. Perceptual and motor skill. 62, p. 107-110.
  • FINKENBERG, M.E.(1992). Cognitive and somatic state anxiety and self-confidence in cheerleading competition. Perceptual and motor skills (Missoula. Mont. 7513 Part. 1
  • GONZÁLEZ DE JUAN, J. (1990) Evaluación y predicción de la ansiedad ante la competición deportiva. Revista de Investigación y documentación sobre las ciencias de la educación física y del deporte. Núm. 15-16 Año VI. p. 55-68
  • HAMBLY, K. (1992). Vence la ansiedad. Madrid: Edad.
  • HARRIS, DV.; HARRIS, BL. (1987). Psicología del deporte. Hispano europea.
  • KRANE, V., & J. WILLIAMS (1994) Cognitive anxiety, somatic anxiety, and confidence in track and field athletics: The impact of gender, competitive level and task characteristics. International Journal of Sport Psychology. 25, 203-217
  • OLIVARES, J. (1998).Técnicas de modificación de conducta. Madrid: Biblioteca Nueva.
  • OÑA, A.; CÁRDENAS, D.; GUTIÉRREZ, M. y MARTÍNEZ, M. (1994). Comportamiento motor: Bases psicológicas del movimiento humano. Granada: Universidad de Granada.
  • RIERA, J. (1985). Introducción a la psicología del deporte. Barcelona: Martínez Roca.
  • WEINBERG, R.S. y GOULD, D. (1996). Fundamentos de psicología del deporte y el ejercicio físico. Barcelona: Ariel Psicología.
  • WILLIAMS, J. M. (1991). Psicología aplicada al Deporte. Madrid: Biblioteca Nueva.

viernes, 25 de noviembre de 2011



EL SISTEMA INMUNOLOGICO: ENFERMEDADES AUTOINMUNES.

DEFINICIÓN:

El sistema inmunológico del cuerpo es el encargado de protegernos de enfermedades e infecciones.
Las enfermedades autoinmunes son aquellas en las que nuestro sistema inmunológico (defensas), funciona de un modo anormal, reaccionando frente a algunas células de nuestro cuerpo como si fueran "enemigos" y por tanto atacándolas y dañándolas. Este desajuste puede afectar solo a un tejido, a un órgano o a varios y acaban incluso produciendo cambios en los tejidos.



Existen más de 80 tipos de enfermedades autoinmunes y algunas tienen síntomas similares. Eso dificulta que su médico sepa si usted realmente padece de una de estas enfermedades, y en caso de padecerla, de cuál de ellas se trata.



CAUSAS:


Aunque se desconoce la causa y en la actualidad no hay unanimidad al respecto, algunas teorías afirman que, junto a una predisposición genética o hereditaria a desarrollar una enfermedad autoinmune., el efecto de algunos microorganismos (virus, bacterias, etc.) y/o el de algunos medicamentos, pueden desencadenar la respuesta inmune en un momento dado de la vida de una persona sana, y los anticuerpos o las células T atacan a las células normales porque éstas presentan alguna similitud estructural con alguna parte o estructura del germen invasor. 

CLASIFICACION:

Los trastornos autoinmunes pueden clasificarse en dos grandes categorías: los que afectan a múltiples órganos (enfermedades autoinmunes sistémicas) y los que afectan a un sólo órgano o tejido (se dice que son localizados).



TIPOS ENFERMEDADES AUTOINMUNES:


Una persona puede tener más de un trastorno autoinmunitario al mismo tiempo. Algunos de los ejemplos de estos trastornos autoinmunitarios o conexos pueden ser, entre otros:

Enfermedades autoinmunes sistémicas(afectan múltiples órfanos)

Enfermedades autoinmunes localizadas(afectan un sólo órgano)

Artritis reumatoidea (articulaciones; con menor frecuencia, pulmones y piel)

Diabetes Mellitus de tipo 1  (islotes pancreáticos)

Lupus [Lupus eritematoso sistémico] (piel, articulaciones, riñones, corazón, cerebro, células rojas sanguíneas, otros)
Tiroiditis de Hashimoto, Enfermedad de Graves (tiroides)

Esclerodermia (piel, intestinos, con menor frecuencia el pulmón)

Enfermedad celíaca, Enfermedad de Crohn, Colitis Ulcerosa (tracto gastrointestinal)
                            
Síndrome de Sjogren (glándulas salivales y lacrimales, articulaciones)
Esclerosis múltiple*Síndrome de Guillain-Barré (sistema nervioso central)

Síndrome de Goodpasture (pulmones, riñones)


Enfermedad de Addison (adrenal)
Granulomatosis de Wegener (senos nasales, pulmones, riñones)
Cirrosis biliar primaria, Colangitis esclerosante, Hepatitis autoinmune (hígado)

Polimialgia reumática (grupos musculares importantes)
Fenómeno de Raynaud (dedos de las manos y de los pies, nariz, orejas)

     Otras enfermedades autoinmunes: 

  • Enfermedad de Crohn: afecta al tubo digestivo, produce una inflamación crónica que cursará de manera progresiva mediante episodios. Suele afectar al tramo final del intestino delgado y al primero del colon, aunque en algunos casos podemos encontrar implicados otros tramos del sistema digestivo.
  • Anemia perniciosa: el estómago no fabrica factor intrínseco que es una sustancia indispensable para absorber la vitamina B12 en el tracto gastrointestinal (vitamina básica para la formación de los glóbulos rojos)
  • Artritis reumatoidea: inflamación de las articulaciones (muñecas, dedos, rodillas, tobillos, etc.) y de los tejidos próximos aunque también pueda afectar a algún órgano. Ocasiona mucha rigidez y dolor.
localisation: articulación metacarpo-falangeal de los dedos de la mano
articulación proximal interfalangeal de los dedos de la mano
articulación distal  interfalangeal de los dedos de la mano
diagnóstico: Artritis reumatoide


  • Enfermedad de Addison: el sistema inmune ataca a la glándula suprarrenal y hay un bajo funcionamiento de la misma. Las consecuencias pueden ser muy diversas ya que esta glándula interviene en la formación de hormonas glucocorticoides, hormonas mineralocorticoides y hormonas sexuales.
  • Enfermedad celíaca: el sistema inmune ataca las vellosidades del intestino delgado en respuesta a la presencia de gluten (proteína presente en la avena, cebada, centeno y trigo) El cuerpo pierde gran parte de su capacidad de absorción de nutrientes y esto puede ocasionar problemas graves.
  • Enfermedad de Graves: ocasiona un hipertiroidismo (la glándula tiroides trabajo de un modo excesivo)
  • Esclerosis múltiple: el sistema inmune daña la vaina de mielina (capa que recubre y protege a las células nerviosas) y con ello los impulsos nerviosos se van bloqueando afectando progresivamente al cerebro y médula espinal.
  • Lupus eritematoso sistémico: es una enfermedad autoinmune inflamatoria que puede afectar a las articulaciones, riñones, piel y otros órganos. El paciente también suele sufrir fatiga y destaca (en la mitad de los pacientes) una erupción en las mejillas y en el puente nasal en forma de mariposa (suele empeorar con la luz solar y afectar a otras zonas del cuerpo)
  • Miastenia grave: hay una debilidad de los músculos "voluntarios" producido por un trastorno neuromuscular. Esto puede provocar dificultad para tragar, párpado caído, dificultad para subir escaleras, para hablar, cabeza caída, etc.
  • Síndrome de Reiter: el sistema inmune ocasiona una serie de problemas inflamatorios en las articulaciones, genitales (urgencia y molestia al orinar, lesiones) y en los ojos (dolor)
  • Síndrome de Sjogren: se van destruyendo las glándulas que producen las lágrimas y la saliva lo cual acaba ocasionando sequedad en la boca, ojos y en general en todas las o mucosas.
  • Tiroiditis de Hashimoto: es una reacción del sistema inmunitario o inmune contra la glándula tiroides (la inflama) que suele ocasionar hipotiroidismo o bajo nivel de funcionamiento.


* Existe todavía cierta controversia acerca de si la Esclerosis múltiple puede considerarse una enfermedad autoinmune. 
Si desea obtener una lista más extensa de trastornos autoinmunes, consulte la página web de la "American Autoimmune Related Diseases Association"



SINTOMAS :      


Varían según el tipo de enfermedad. 
En muchas personas, los primeros síntomas son cansancio o fatiga, sensación de malestar crónico o fatiga y algún tipo de dolor, en función del tipo de enfermedad autoinmune de la que se trate, ya que, aunque todas tienen en común que el cuerpo ataca a sus propias células, de un tipo a otro, hay muchas diferencias.
Las enfermedades autoinmunes, por lo general, actúan por lo que se denominan "brotes", que significa que se alternan épocas en que los síntomas son menos leves e incluso inexistentes, permaneciendo en estado latente con otras en que la enfermedad asoma, haciendo saber que sigue ahí, que no te puedes olvidar de ella. Es por ello que  también pueden hacerse más agudas, momentos en los que empeoran, y remisiones temporales, nunca una curación, al menos en la actualidad todavía no se ha encontrado cura para este tipo de enfermedades, pero pueden tratarse los síntomas.
Muchos pacientes también tienen un sentimiento de impotencia o desánimo al tener un tipo de enfermedad que el médico ya avisa que es crónica y sin esperanza de curación, pues
normalmente solo suele haber tratamiento para remitir los síntomas y evitar complicaciones. Lo que también suele desesperar a los pacientes es que la mayoría de medicamentos para las enfermedades autoinmunes tienen a su vez efectos secundarios con lo que poco a poco van empeorando su calidad de vida. A veces algunos pacientes empiezan a desarrollar, a la vez, otras enfermedades autoinmunes.




DIETA Y SISTEMA INMUNE:

Independientemente de si se opta por fármacos químicos que frenan el avance de la enfermedad o bien por la medicina natural (homeopatía, fitoterapia, flores de Bach...), lo que sí está claro es que si alimentarse bien es básico para una buena salud, en estos casos aún es más importante. Lo primero es tratar de eliminar de nuestra dieta todos aquellos alimentos que puedan alterar nuestro sistema inmune.

RECOMENDACIONES:


   - Dieta: alimentación equilibrada: disminuir el consumo de fritos y alimentos procesados.

- Relajarse y disminuir el estrés físico y psíquico.

Dormir las horas necesarias (unas ocho horas) es importante para todo el mundo pero aún más para pacientes con enfermedades autoinmunes, ya que ayuda a "recuperar" las fuerzas y el equilibrio a nuestro organismo.

- Practicar algún deporte suave es necesario, ya que nos ayuda a relajarnos y a eliminar toxinas.



- Apoyarse en la família, especialmente en las fases iniciales de la enfermedad, ya que resulta difícil de asumir que se va a convivir con una enfermedad toda la vida.






OPINION PERSONAL:


El hecho de conocer que se va a convivir con una enfermedad de por vida, especialmente  al principio, cuando se diagnostica, resulta muy duro para cualquier persona, ya que a nadie le gusta pensar que su enfermedad no tiene cura de ninguna de las maneras posible. Sin embargo y, a pesar de ello, no quiere decir que no se pueda llevar una vida más o menos normal, de modo que siendo positivos, se gana muchísimo terreno a la enfermedad. Creo que es uno de los factores más importantes para asimilarlo y ser feliz, a pesar de que uno pueda sentirse diferente a los demás y pase algunas épocas peores. Muchos ánimos a todas las personas que, como yo, padecéis alguna enfermedad autoinmune. Aún tengo la esperanza de que algún día se encuentre alguna solución a este problema y se pueda curar la enfermedad. Si no, nos tendremos que conformar con disfrutar con los momentos en que la enfermedad se "oculta" y pasar los malos momentos de la mejor manera posible "hasta que la muerte nos separe". Un saludo: ELENA




jueves, 24 de noviembre de 2011

dieta para bajar los trigliceridos


Uno de los parámetros que se deben tener en cuenta cuando se sufre de hipercolesterolemia es el colesterol LDL. En caso de que se encuentre elevado, es necesariobajar el colesterol malo, a través de los alimentos de la dieta. Para lograrlo es necesario poner en práctica unmenú para reducir el colesterol LDL, que ayudará a revertir esta situación.

Cuando tu colesterol malo o LDL se encuentra por encima de 130 mg/dl, tendrás que poner en práctica un tratamiento especial para lahipercolesterolemia, indicado por tu médico.



La dieta para bajar el colesterol malo debe cumplir ciertas características:
  • Baja en grasas saturadas.
  • Sin grasas trans.
  • Mayor cantidad de hidratos de carbono complejos.
  • Baja en hidratos de carbono simples.
  • Bajo contenido de sodio.
  • Debe contener 6 comidas diarias.



Menú para reducir el colesterol LDL
Día 1
  • Desayuno: 1 vaso de leche descremada con infusión, 2 tostadas de pan integral con 1 cdita de queso untable descremado y dulce dietético, 1 vaso de zumo de naranja natural.
  • Media mañana: 1 fruta fresca.
  • Almuerzo: 1 taza de caldo de verdura casero con 1 cdita lecitina de soya, 1 porción de pescado a la parrilla con vegetales cocidos al horno, 1 taza de ensalada de frutas.
  • Merienda: 1 yogur descremado con cereales dietéticos.
  • Media tarde: 1 trozo de queso dietético
  • Cena: 1 taza de caldo de verduras casero con 1 cdita de lecitina de soya, 1 porción grande de ensalada de lechuga, tomate, rúcula, cebolla y zanahoria rallada, 1 gelatina dietética.
Día 2
  • Desayuno: 1 vaso de licuado de duraznos hecho con leche descremada, 2 tostadas de pan integral untado con queso untable.
  • Media Mañana: 1 barrita de cereal dietética.
  • Almuerzo: 1 taza de caldo de verdura casero con 1 cdita de lecitina de soya, 1 porción de pasta integral con salsa fileto, 1 fruta asada.
  • Media Tarde: 1 trozo de queso dietético.
  • Cena: 1 taza de caldo de verduras casero con 1 cdita de lecitina de soya, 1 porción de pechuga de pollo con 1 porción de ensalada agridulce.
Día 3
  • Desayuno: 1 vaso de leche descremada con infusión, 2 rodajas de piña, 2 tostadas de pan integral untado con dulce dietético.
  • Media Mañana: 1 puñado de almendras.
  • Almuerzo: 1 taza de caldo de verduras casero con 1 cdita de lecitina de soya, 1 porción de carne de ternera desgrasada, 1 porción de puré de calabaza, 1 fruta.
  • Merienda: 1 yogur descremado con frutas.
  • Media Tarde: 1 trozo de queso dietético.
  • Cena: 1 taza de caldo de verduras casero con 1 cdita de lecitina de soya, 2 porciones de budín de zapallitos, 1 gelatina dietética.
Día 4
  • Desayuno: 1 taza de leche descremada con infusión, 2 rodajas de melón, 2 tostadas de pan integral con queso untable.
  • Media Mañana: 1 fruta.
  • Almuerzo: 1 taza de caldo de verdura casero con 1 cdita de lecitina de soya, 1 porción de arroz integral con verduras cocidas (zanahoria, apio, brócoli, espárragos), 1 fruta.
  • Merienda: 1 yogur decremado con cereales sin azúcar.
  • Media Tarde: 1 trozo de queso dietético.
  • Cena: 1 taza de caldo de verduras casero con 1 cdita de lecitina de soya, 1 porción de pescado asado con ensalada de alcachofas, 1 fruta.
Día 5
  • Desayuno: 1 vaso de licuado de frutillas, 2 tostadas de pan integral con queso untable y dulce dietético.
  • Media Mañana: 1 taza de ensalada de frutas.
  • Almuerzo: 1 taza de caldo de verduras casero con 1 cdita de lecitina de soya, 1 porción de pechuga de pollo al limón con puré de calabaza y zanahoria, 1 gelatina dietética.
  • Merienda: 1 yogur dietético con 1 barrita de cereal dietética.
  • Media Tarde: 1 trozo de queso dietético.
  • Cena: 1 taza de caldo de verduras casero con 1 cdita de lecitina de soya, 1 porción de ensalada de atún, arroz integral, zanahoria rallada y huevo picado, 1 fruta.
Día 6
  • Desayuno: 1 vaso de leche descremada con infusión, 2 tostadas de pan integral con dulce dietético, 1 vaso de zumo de toronja.
  • Media Mañana: 1 fruta.
  • Almuerzo: 1 taza de caldo de verduras casero con 1 cdita de lecitina de soya, 1 porción de fideos integrales con verduras cocidas (zapallitos verdes, apio, brócoli, zahoria, brotes de soya), 1 fruta.
  • Merienda: 1 yogur bebible dietético con 1 puñado de nueces.
  • Media tarde: 1 trozo de queso dietético.
  • Cena: 1 taza de caldo de verduras casero con 1 cdita de lecitina de soya, 1 porción de zapallitos rellenos, 1 gelatina dietética.
Día 7
  • Desayuno: 1 vaso de leche descremada con infusión, 2 rodajas de piña, 2 tostadas de pan integral con queso untable.
  • Media Mañana: 1 barrita de cereal dietética.
  • Almuerzo: 1 taza de caldo de verdura casero con 1 cdita de lecitina de soya, 1 porción de guiso de lentejas (sin panceta, ni aceite), 1 fruta.
  • Merienda: 1 yogur descremado con cereales sin azúcar.
  • Media Tarde: 1 trozo de queso dietético.
  • Cena: 1 taza de caldo de verduras casero con 1 cdita de lecitina de soya, 1 porción de pescado a la parrilla, 1 tomate partido al medio condimentado con aceite de oliva, orégano, sal y vinagre, 1 taza de ensalada de frutas.
Sin necesitas recurrir a un tratamiento natural y dietético, este menú para reducir el colesterol LDL, puede ser de mucha utilidad.
Recuerda que debes recurrir a tu médico ante cualquier duda.